- El 38 % de los compradores residenciales están pasando de arrendatarios a propietarios y 27% que vivía con sus padres.
- Las inmobiliarias certificadas por Best Place to Live construyen 5,6 veces más recomendación de marca, destacando en la calidad del servicio ofrecido.
El perfil del comprador inmobiliario en nuestro país es dinámico y cambiante. El estudio Perfil del Comprador Inmobiliario Peruano 2024, realizado por Best Place to Live® ofrece insights valiosos sobre el comportamiento de distintas generaciones, preferencias de compra, características familiares, y otros factores como la satisfacción del cliente y las recomendaciones de marca.
El estudio destaca que el mercado inmobiliario actual está dominado por los Millennials (40 a 28 años), quienes representan el 50% de los compradores, seguidos por la Generación X con un 33% (59 a 41 años). Esto significa que las personas de entre 28 a 59 años constituyen el grupo principal de compradores de viviendas en Perú.
Por otro lado, los Centennials están comenzando a ganar terreno, con un 7% de las ventas, liderado por compradores entre 25 a 27 años. Los Baby Boomers (60 años o más) se mantienen aún con un 9% de participación.
«Es importante destacar que los Centennials están emergiendo, si bien hoy son el 4 grupo de compra, en los próximos 20 años irán en constante crecimiento. Esto obliga a las empresas a seguir adaptando sus procesos para este nuevo grupo y sus características de consumo”, agrega Cinthia Pasache, gerente comercial de Best Place to Live® en Perú.
En cuanto al mercado residencial, el estudio revela que la mayoría de las compras en este periodo, se dirigen a viviendas principales o para residir con un 63%, mientras que el 23%, un número que viene en evolución, se destina a inversión o alquiler.
“Estamos viendo que la preferencia por la inversión en bienes raíces sigue aumentando, lo que indica que los compradores ven el valor a largo plazo de invertir en una propiedad inmobiliaria. En cambio, el mercado de viviendas vacacionales muestra variaciones en función del número de proyectos entregados cada año”, agregó Pasache.
En cuanto a los compradores de viviendas para residir (63%), el 38% de ellos está migrando de arrendatario a propietario, lo que resalta una tendencia significativa. Además, un 27% de los compradores vivía previamente con sus padres antes de adquirir su vivienda, mientras que solo un 25% son antiguos propietarios que vuelven a comprar. Finalmente, el 59% vivía anteriormente en un departamento y el 41% en casa.
«El porcentaje de personas que eran arrendatarios junto con los que vivían con sus padres es un importante indicador para estar revisando constantemente, ya que nos muestra si la demanda de viviendas para la compra gana o pierde profundidad por interés de las personas», añadió Pasache.
Alineado a esto, el estado civil de los compradores es otro indicador interesante. El 46% es soltero(a) y un 33% casado(a). Solo el 13% convive y un 5% está divorciado.
Finalmente, en cuanto al tamaño y tipo de grupo familiar que adquiere viviendas, el promedio es de 2,4 personas por hogar al momento de comprar, según declaran los compradores.
Satisfacción de clientes con el sector inmobiliario
La satisfacción del cliente varía según el tipo de compra y la generación. La venta de viviendas para inversión o alquiler reportó ser la más alta, con un 57% de satisfacción neta, esto en una escala que va de -100 a 100%. Esto es 19 puntos netos mayor satisfacción en comparación con aquellas personas que adquirieron una vivienda para residir, que alcanzaron un 38% de satisfacción neta.
Además, las generaciones mayores están más satisfechas con sus compras y por ende con la inmobiliaria a la que compraron, lo que se refleja en un 62 y 52% de satisfacción neta para los grupos Baby Boomers y Gen X, en cambio en los segmentos más jóvenes los Millennials y Centennials, alcanza un 36 y 34% de satisfacción neta, respectivamente.
«Las características de compra de las diferentes generaciones son distintas y al ser la compra inmobiliaria, un proceso que puede durar entre 24 a 36 meses, desde la reserva hasta la entrega y post venta de la vivienda, las empresas están obligadas a actualizar sus procesos para atender a los nuevos grupos de compra, entregándoles el nivel de satisfacción que ellos buscan a través de las acciones que ellos valora», comenta Pasache.
Recomendación de marca: Un factor diferenciador
Las inmobiliarias certificadas por Best Place to Live® marcaron 5,6 veces más recomendaciones de marca que las no certificadas. Los servicios ofrecidos por estas inmobiliarias, en complemento a entregar un producto con mayor calidad, es parte del factor más influyente en estas recomendaciones.
El estudio mostró que el 70% de la incidencia de la recomendación de marca se da por la experiencia vivida con los servicios entregados por las inmobiliarias, servicios como la etapa de gestión comercial, el proceso de entrega y post venta. «Nuestro compromiso con apoyar que las empresas inmobiliarias entreguen calidad y un buen servicio durante todo el viaje del cliente, se refleja en las altas tasas de recomendación que reciben las inmobiliarias certificadas», concluyó Pasache.