Luego de sufrir la invasión de su terreno, el propietario cuenta con algunas herramientas legales a tener en cuenta, indicaron especialistas.
La primera es la denominada defensa posesoria, mediante la cual el propietario cuenta solo con 15 días para expulsar al invasor por la fuerza y recuperar su propiedad.
“Para ello se debe pedir el respaldo policial para, como se suele decir, tomar justicia por mano propia”, indica el abogado Daniel Linares, socio del Estudio Linares.
Pero si transcurrido ese tiempo el propietario no ha logrado expulsar al invasor, la segunda acción será iniciar una demanda judicial de desalojo.
Los procesos judiciales de este tipo suelen dilatarse, por lo que agotando todas las instancias pueden tardar entre cinco a seis años en promedio, refiere por su parte Dulmer Malca, asociado senior del área inmobiliaria del estudio Miguel Mur & Abogados.
Frente a este escenario, los especialistas subrayan que existe una tercera vía y es la venta del título de propiedad a los invasores o a los posesionarios que luego compraron el terreno a los invasores iniciales.
“Ya hemos asesorado algunas ventas de este tipo. Son para casos en que la expulsión de los invasores se complica, pues ya pasó mucho tiempo, se han construido casas e infraestructura de servicios, por lo que el propietario buscará recuperar parte del valor de su terreno”, sostuvo Linares.
Explicó que para el posesionario, el interés en comprar el terreno está en que el convertirse en propietario le abre posibilidades de acceso a créditos o de luego poder vender su vivienda.
No obstante, en estos casos el precio de venta del terreno será menor a su valor original. “Esto pues estamos en una negociación complicada, por lo que se aplica un descuento y baja el precio del título de propiedad”, apunta Linares.
Para optar por esta vía el propietario evaluará cuán costoso significaría continuar con el proceso judicial y sus posibilidades de lograr un exitoso desalojo en el futuro, refirió por su parte Dulmer Malca, del estudio Miguel Mur & Abogados.
“Sí hemos visto casos en los cuales el propietario ha terminado negociando la propiedad con los invasores. Pueden hacer la venta a la asociación que invadió el terreno o tener una negociación directa con cada posesionario que forma parte de la asociación. Pero el precio de venta sí tendrá que ser castigado en un porcentaje”, remarcó.
Entre los requisitos para que la venta proceda, el terreno debe estar inscrito a nombre del propietario y sin problemas de superposición ni conflictos con otras personas. “Y si el terreno es producto de una herencia, todos los herederos deben estar de acuerdo con la venta”, apuntó Linares.
