Los créditos hipotecarios bancarios se reducen ante la mayor percepción de riesgo local y el encarecimiento del financiamiento.
Así, el número de nuevas hipotecas colocadas por el sistema bancario totalizó 7,490 entre octubre y diciembre del 2022, aunque en el mismo periodo del año previo los créditos para vivienda otorgados fueron 10,798, según datos de la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS).
Ello representa una caída de 30% en las hipotecas colocadas en el cuarto trimestre del año pasado, como consecuencia del elevado riesgo político y el incremento de las tasas de interés.
El riesgo país es un componente que influye mucho en el financiamiento de largo plazo y hoy se registra un notorio sentimiento de cautela en el consumidor, su confianza muestra un deterioro y hay preocupación por la situación local, dijo a Gestión Mario Guerrero, subgerente de Economía Monetaria de Scotiabank.
Además, el alza de tasas de interés se traduce en un encarecimiento de todos los créditos, lo que inhibe la toma de decisiones importantes, como la adquisición de una vivienda, cuyo financiamiento es de ticket elevado y plazos largos, señaló.
De acuerdo con datos de la SBS, la tasa de interés promedio de la banca para un crédito hipotecario llegó al 10%, tal como analistas proyectaron a Gestión en octubre del 2022. Este es su nivel más alto de los últimos 13 años.
En la misma línea, Sergio Urday, docente de Economía de la Universidad San Ignacio de Loyola, coincidió en que hay un freno en la demanda de créditos hipotecarios y cierto endurecimiento en la oferta bancaria de este producto.
Las entidades calculan la capacidad de pago del cliente con base en sus ingresos y situación laboral, aunque con una tasa de interés más alta la cuota mensual será mayor y el deudor podría no soportarla, por lo que quedaría sin acceso a ese préstamo, sostuvo.
“El cliente deberá conformarse con un préstamo por montos menores; si quería comprar un departamento en Magdalena ahora pensará en Jesús María o Pueblo Libre, o quizás en uno de menor tamaño que se adecúe a lo que el banco le ofrece”, acotó.
Esperan y ahorran para cuota inicial
En tanto, Guerrero comentó que la situación incierta de los últimos meses, el conflicto social y mayores precios afectan la economía familiar y perjudican también su estabilidad laboral.
El deudor no tiene la garantía de que continuará en su trabajo por un largo plazo, que calce con el periodo de financiamiento, por lo que prefiere esperar a que el contexto mejore y que las tasas de interés retrocedan un poco mientras siguen ahorrando para el pago de la cuota inicial, añadió.
Otros ejecutivos del sistema bancario mencionaron una reducción en el volumen de ventas (hipotecas) en el último trimestre, sobre todo en segmentos de vivienda residencial de alto valor, a diferencia de la vivienda social que continúa con dinamismo.
La crisis política interna genera inestabilidad, y mientras las familias no observen una mejora en la situación local por las manifestaciones y discordia en las calles, será muy difícil que opten por tomar un crédito hipotecario, refirieron.
Ese riesgo país se combina con la elevada inflación que afrontan los peruanos y hace más dura la situación para los deudores, agregaron.
Oferta hipotecaria
Para Urday, hay una postura más conservadora de la banca en cuanto a la oferta de crédito hipotecario pues el crecimiento económico se desacelera, los eventos e inestabilidad incrementan el riesgo y las perspectivas empeoran.
Al tercer trimestre, un porcentaje menor de entidades financieras señalaba que iba a flexibilizar sus condiciones crediticias para hipotecas y ninguna dijo que lo iba a hacer en el cuarto trimestre de 2022, por tanto, es natural el endurecimiento de sus políticas, afirmó.
Por su parte, Guerrero prevé un mayor impacto en la demanda de hipotecas que en la oferta pues el inmueble que se financia es una garantía para la banca en caso el deudor no pueda cumplir con su pago.
Las razones de la subida de tasas de hipotecas
Las tasas de interés de las hipotecas subieron a 10%, en promedio, por el mayor riesgo politico, pero también por el incremento del costo de fondeo de los bancos, a raíz de las continuas subidas de la tasa de interés del BCR y de las tasas de los bonos del Gobierno a 10 años, que es referencia para los créditos hipotecarios, indicaron los bancos.
Un factor importante del alza de tasas hipotecarias es el rendimiento del bono soberano local. La tasa de interés de los papeles del Tesoro de EE.UU. aumentó y eso incrementó la de los títulos de Gobierno peruano, lo que termina afectando el costo de financiamiento de largo plazo, señaló Guerrero.