Las labores de construcción de las defensas ribereñas y diques en la provincia de Huarmey, en la región Áncash, que busca reducir el impacto del daño ocasionado por posibles huaicos e inundaciones, vienen siendo interrumpidas por los agricultores del valle de esta zona que se oponen al diseño de la importante obra, retrasando el cronograma establecido y obligando a paralizar los trabajos de ejecución, lo que ocasiona pérdidas económicas irreparables para el Estado peruano.
Las labores forman parte de las soluciones integrales que realiza la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios (ARCC) en diferentes puntos del país. Estas obras permitirán proteger áreas de cultivo, colegios, carreteras y principalmente los hogares de las más de 30 mil familias huarmeyanas, precisa el respectivo comunicado.
Ante esta situación, la ARCC exhorta a dirigentes y agricultores a establecer una mesa de diálogo en la que puedan recibir toda la información que requieran sobre el desarrollo de esta intervención de interés social e inevitable necesidad pública.
Añade que impedir el desarrollo de esta obra pone en peligro su continuidad, atentando contra los intereses de la población y la protección de sus familias.
“Creemos firmemente en el derecho a las protestas, pero bloquear vías es un acto que constituye un delito. Los instamos al diálogo para llegar a una solución, las medidas de protesta sólo provocan daños irreparables a nuestra patria y a las familias que necesitan de estas obras de protección, ante el riesgo de huaicos e inundaciones de sus viviendas”, puntualiza el comunicado.
Finalmente, la ARCC reitera su compromiso de seguir trabajando en favor de la población más vulnerable del país y las necesidades de esta demanda, siempre en el contexto de la legalidad y con honestidad y transparencia.