Dentro de la denominada Lima Moderna (LM), Jesús María –también incluye en este segmento a Surquillo, San Miguel, Lince, Pueblo Libre y Magdalena–, es uno de los distritos preferidos por los compradores a la hora de adquirir un departamento.
De hecho, la Asociación de Empresas Inmobiliarias del Perú (ASEI) señala que del 100% de las ventas realizadas en LM a setiembre del año pasado, el 33% corresponde a Jesús María. A su vez, la demanda –al menos por ahora– no está desvinculada de la oferta, la cual hoy representa un tercio (500) de la propuesta inmobiliaria existente en LM.
Pese al potencial que muestra el distrito, con proyectos en construcción y con muchos otros en camino, la municipalidad distrital, hoy bajo las riendas de su alcalde Jesús Gálvez, adelanta “que menos licencias de edificación se van a entregar”.
La autoridad edil sostiene esta posición en vista de las 370 licencias para la edificación de departamentos que se otorgaron entre el 2019 y el 2022. Además, alude a los 1,175 certificados de parámetros urbanísticos emitidos –en el mismo periodo–, cuya razón de ser, finalmente, es la construcción de más proyectos inmobiliarios.
“No estamos en contra de la inversión, pero se está destruyendo el paisaje urbanístico de Jesús María. Las licencias y los certificados tienen que entregarse acorde a la realidad del distrito; por ejemplo, hay que evaluar la factibilidad del agua y el desagüe. El caudal del agua está perdiendo potencia y los desagües están colapsando”, indica la autoridad.
Otro aspecto que Gálvez cuestiona es el menor número de estacionamientos por cada departamento en un edificio. “Por dos departamentos dan un estacionamiento cuando por un apartamento deben ser dos estacionamientos. Es decir, en un edificio de 80 departamentos, solo se construyen 40 estacionamientos y los otros 40 carros, ¿dónde se estacionan? ¿En la calle?”, critica.
Al respecto, el alcalde afirma que se revisará la normativa que regula estos casos y que deriva de la Municipalidad Metropolitana de Lima y, de requerirse, justificados en la autonomía que tiene cada distrito, emitir una ordenanza municipal que ajuste algunos requerimientos para nuevas edificaciones; ello, en vínculo con la situación actual de la zona.
“Con el número de certificados de parámetros urbanísticos que ha entregado la gestión anterior, prácticamente, yo voy a ser el alcalde que menos licencias va a entregar. No se puede continuar con esa densidad con la que se está saturando el distrito. Nosotros promovemos el crecimiento, pero ordenado”, reitera.
En lo que concierne a la oferta de terrenos para expansiones inmobiliarias, Gálvez reconoce que todavía existe importante número de casonas que podrían tener estos fines. Asimismo, detalla que hoy el metro cuadrado varía en precios desde los US$ 1,000 hasta los US$ 3,500, dependiendo de la ubicación y la altura de construcción que permita el frontis.
Negocios
De otro lado, Gálvez afirma que los rubros que más crecieron en los últimos dos años en el distrito fueron gastronomía, salud y belleza, y comercio. No obstante, resalta que el nivel de rotación en los locales comerciales de Jesús María es alto, toda vez que permanentemente hay cambio de rubros.
En ese sentido, estima que de un año para otro se crean aproximadamente 500 negocios; sin embargo, similar número de comercios cierra dentro de los primeros seis meses, dando lugar a la apertura de nuevas líneas en las mismas tiendas.
Respecto al alquiler de locales comerciales, la autoridad sostiene que si bien, durante la pandemia, los precios de los arriendos se redujeron, actualmente están recuperando los valores de la etapa precovid e incluso por encima de los que mantenían en el 2019. De ese modo, indica que las tiendas comerciales asumen precios desde los US$ 1,500, mientras más se acercan al límite con San Isidro o de incluso US$ 400 en las zonas aledañas a la avenida Brasil o al centro de Lima.
“Una propuesta que vamos a impulsar es la de emitir licencias de funcionamiento temporales con vigencia de entre 6 meses a un año. La finalidad es que el emprendedor tenga ese tiempo para evaluar si su negocio funciona o no; además, de incorporar a la formalidad a aproximadamente 2,000 comercios que estarían en esa condición”, expresa la autoridad, quien afirma que el valor de estas licencias sería la mitad de lo que cuesta un permiso definitivo.