La noche del último jueves la Fiscalía y la Procuraduría anunciaron la firma de un acuerdo de colaboración eficaz con Aenza, ex Graña y Montero, mediante el cual la empresa se compromete a un pago de reparación civil por S/ 480 millones, en un plazo de 12 años, debido a su participación en el caso Lava Jato.

¿Cómo impactará este pago en las finanzas de la empresa? Al respecto, en comunicación con Gestión, Aenza señaló que ya tenía contemplado el pago de esta obligación dentro de sus proyecciones financieras y de liquidez.

Y es que en mayo del 2021 Aenza había firmado un preacuerdo con las autoridades, con un monto de reparación civil similar. Ahora se espera que el acuerdo sea ratificado por el Poder Judicial para iniciar los pagos.

“Los resultados operativos que esperamos al cierre de año estarán en línea con los reportados para el segundo trimestre del 2022, que muestran una mejora respecto al mismo periodo para los años 2021 y 2020, fruto de la recuperación de los niveles de actividad en nuestras unidades de negocio”, señaló la empresa.

“Ni Aenza ni ninguna de sus subsidiarias se verán afectadas en su capacidad para cumplir plenamente sus obligaciones contractuales actuales. Por el contrario, la firma del acuerdo representa un avance importante en el proceso de recuperación de la compañía y permite que los más de 18,000 trabajadores se concentren en la ejecución de la estrategia de crecimiento y consolidación a nivel regional”, agregó Aenza.

Por su parte, los especialistas coinciden en que la empresa no tendría falta de liquidez, pues al ser un compromiso previsto con anticipación, ya ha venido provisionando parte de los recursos.

“Al confirmarse la cifra de la reparación esto dará tranquilidad a las proyecciones de la compañía. Muy distinto sería si el proceso se cayera, ya que se generaría incertidumbre sobre el monto total”, refirió Carlos Carazas, analista de Inversiones de Seminario SAB.

Por su parte Marco Mejía, analista de inversiones Kallpa SAB, recuerda que en el segundo trimestre del año Aenza reportó utilidades por S/ 5.4 millones, recuperándose tras la pérdida de S/ 26.9 millones registrada en similar trimestre del 2021.

Kallpa SAB estima que esta tendencia se mantendrá y al cierre del 2022 la compañía podría obtener S/ 50 millones en utilidades, luego de las pérdidas de S/ 117 millones del 2021.

No obstante, la cotización de la acción de Aenza ha tenido una baja de 42% en lo que va del año. Mejía refiere que ello se debe al aumento de los costos y gastos financieros de la empresa, relacionado al pago de bonos convertibles.

Asimismo, indica que también influye el panorama de incertidumbre en el sector construcción por la baja confianza empresarial.

En la jornada bursátil de hoy, tras conocerse la noticia del pago de reparación civil, las acciones de Aenza bajaron 6.2% en la bolsa limeña, y 8.5% en la plaza norteamericana.

“Asumimos que podrían ser de algunos inversionistas que no estaban al tanto del proceso de reparación civil de la empresa. Pero, en general, vemos estas caídas poco representativas porque fueron con muy poco volumen de negociación”, anotó Mejía.

Antecedentes. En el 2019 Graña y Montero inició negociaciones con la Fiscalía para llegar a un acuerdo de colaboración eficaz. En febrero del 2020 la compañía en un comunicado pidió disculpas al país y anunció su nuevo nombre: Aenza. En mayo del 2021 Aenza llegó a un acuerdo preparatorio de colaboración eficaz donde reconoce actos de corrupción en 16 proyectos de infraestructura.