La construcción de la Vía Expresa Sur continúa generando controversia y malestar en varios distritos de Lima. Recientemente, se ha desatado un conflicto con los vecinos de Santiago de Surco y Barranco, debido al desalojo de algunos comercios ubicados en áreas cercanas al trazado de la obra. En particular, el conocido Mercado Las Flores, que se encuentra a pocos minutos de la estación Las Flores del Metropolitano, ha recibido una notificación por parte de la Municipalidad Metropolitana de Lima, exigiendo su desalojo inmediato. En caso de no cumplirse con esta orden, las autoridades advirtieron que procederían al derrumbe del mercado.

Este mercado ha sido por años un punto de encuentro importante para los habitantes de los distritos cercanos, quienes acuden diariamente en busca de productos frescos. Los comerciantes que allí operan piden un plazo de al menos un mes para poder retirar sus pertenencias y desmontar sus puestos, especialmente porque muchos de ellos venden productos perecibles que requieren un manejo cuidadoso. Marco Plasencia, uno de los comerciantes, expresó en una entrevista que aplauden la ejecución de la obra, pero resaltó la necesidad de un tiempo prudente para evacuar sus productos e inversiones, ya que no pueden hacerlo en un plazo tan corto.

Los vendedores también señalaron que el local donde operan es alquilado y que cuentan con un contrato con el propietario, por lo que consideran que se les debe ofrecer una solución que no afecte tan drásticamente sus negocios. A pesar de sus esfuerzos por establecer un diálogo con la administración del alcalde Rafael López Aliaga, no han recibido respuesta. Ante esta falta de comunicación, un grupo de comerciantes organizó una vigilia para llamar la atención de las autoridades y pedir más tiempo para organizar su salida.

Mientras tanto, en el distrito de Santiago de Surco, la situación se ha intensificado con el desalojo de los comerciantes en el mercado Virgen del Carmen y otros establecimientos cercanos. A primera hora de la mañana, maquinarias pesadas y efectivos policiales, acompañados de representantes de Serenazgo, llegaron al lugar para proceder con el desalojo. De acuerdo con los testimonios de los comerciantes afectados, solo algunos recibieron la notificación con anticipación. Aunque están a favor de la construcción de la Vía Expresa Sur, muchos de ellos pidieron más tiempo para poder organizar su mudanza, ya que llevan décadas operando en estos mercados.

En el caso del mercado Virgen del Carmen, algunos comerciantes retiraron sus pertenencias de manera apresurada para evitar daños a sus productos y artículos, dejando el lugar desolado. Este desalojo ha sido especialmente doloroso para aquellos que han estado en el mercado durante más de 30 años, y que ahora se ven forzados a abandonar sus puestos sin una alternativa clara de reubicación. Los comerciantes indicaron que no se les brindó el tiempo suficiente para encontrar nuevas ubicaciones o buscar soluciones que les permitieran continuar con sus negocios sin pérdidas.

Además de los comerciantes, tres instituciones educativas cercanas también se verán afectadas por las obras de la Vía Expresa Sur. El Colegio Champagnat, el Hiram Bingham y Santa Teresita han sido identificados como perjudicados por el proyecto. Sin embargo, según la dirección del colegio Champagnat, la municipalidad no ha tenido una comunicación directa con la institución para coordinar los impactos que podría generar la obra en sus instalaciones. La dirección del colegio emitió un comunicado en el que señala que, aunque están al tanto de que el proyecto estaba pendiente desde hace años, tomaron las medidas necesarias para que la educación no se vea interrumpida.

Por su parte, la regidora de la Municipalidad de Lima, Roxana Rocha, indicó que sí ha existido comunicación con los colegios afectados, y que se han tomado medidas para minimizar las molestias. A pesar de estas declaraciones, la falta de coordinación y la preocupación de los colegios sobre el impacto de las obras siguen siendo un tema de discusión. El malestar también radica en la falta de información clara y oportuna sobre los planes de reubicación y las obras que afectarán directamente a las instituciones educativas.

La Vía Expresa Sur es un ambicioso proyecto de infraestructura que busca mejorar la conectividad vial en Lima. Esta obra ha estado en proceso de planificación durante más de 50 años, y a pesar de los esfuerzos por concretarla, solo en la última década se han dado pasos significativos para su ejecución. La obra tiene como objetivo reducir los tiempos de traslado entre el sur y el norte de la ciudad, facilitando el flujo de vehículos y aliviando el congestionamiento que actualmente afecta a la capital peruana.

El proyecto, que se espera esté finalizado entre 2026 y 2027, tiene la ambiciosa meta de conectar los distritos de San Juan de Miraflores y Carabayllo en solo 45 minutos, lo que representaría una mejora sustancial en la movilidad urbana de Lima. La Vía Expresa Sur es vista como una necesidad urgente para modernizar la infraestructura de transporte de la ciudad, pero al mismo tiempo, está siendo criticada por los impactos que está generando en diversas zonas residenciales y comerciales.

El conflicto también ha desatado un enfrentamiento político, especialmente entre la actual gestión del alcalde Rafael López Aliaga y el exministro de Vivienda, Carlos Bruce. A través de un comunicado, Bruce ha denunciado que existen intentos por obstruir la ejecución de las obras, lo que ha generado tensiones entre ambas partes. Desde el municipio, se ha negado estas acusaciones, asegurando que las obras continúan sin mayores obstáculos y que no hay intenciones de paralizarlas.

Este enfrentamiento político ha complicado aún más el panorama de la Vía Expresa Sur, generando incertidumbre entre los vecinos, comerciantes y educadores afectados. La falta de respuestas claras y la falta de un plan de reubicación adecuado para los comercios y las instituciones educativas no hacen sino aumentar el descontento en la población, que aún espera una solución definitiva para los problemas causados por la ejecución de este proyecto de gran envergadura.