El ministro de Transportes y Comunicaciones, Raúl Pérez Reyes, anunció que en el presupuesto público de 2025 se incluirá la elaboración del estudio técnico para el diseño de un tren que conecte Pucallpa, en Ucayali, con la costa peruana.

“Este proyecto ha sido incluido en el presupuesto para 2025, y es parte del compromiso establecido en el discurso del 28 de julio por la presidenta Dina Boluarte. Debemos asumir nuestra responsabilidad en este proceso”, expresó el ministro.

Pérez Reyes explicó que la ruta desde las localidades brasileñas de Cruzeiro do Sul y Río Branco, atravesando Pucallpa hacia el centro del Perú, representa la opción más corta para llegar al puerto de Chancay. “Sin duda, es la ruta más directa hacia Chancay, aunque enfrentamos varios desafíos en el camino”, afirmó.

Uno de los principales retos mencionados es la franja de 100 kilómetros que conecta Pucallpa con la frontera brasileña, que pasa por la Reserva del Parque Nacional Sierra del Divisor. “No podemos aplicar soluciones convencionales como construir una carretera, ya que eso dañaría gravemente la Amazonía”, advirtió.

El ministro sugirió que la solución podría ser una vía ferroviaria elevada, evitando así el impacto en el ecosistema de la reserva. “Esa sería una inversión significativa que necesitaríamos asumir, mientras que los brasileños tendrían que ocuparse de los 80 kilómetros que faltan desde Cruzeiro do Sul hasta la frontera”, agregó.

Además, Pérez Reyes destacó que para viabilizar el tren en la frontera entre Perú y Brasil, sería necesario un volumen de movimiento comercial que lo justifique. También mencionó que parte de la carga se trasladaría a través de la Interoceánica Sur.

“Si el dinamismo comercial en los estados brasileños de Acre y Rondonia respalda la necesidad de un tren desde Cruzeiro do Sul a Pucallpa, se evaluará esa posibilidad en su momento”, indicó.

En declaraciones anteriores, el ministro había mencionado que el interés y financiamiento para la construcción de un tren bioceánico que conecte con el puerto de Chancay deberían provenir de Brasil y China, dado que Perú ya tiene definida su conectividad con Asia.

“Creemos que cualquier interés en un tren bioceánico debería surgir de Brasil o China. Perú no tiene un interés particular en acceder al Atlántico, nuestro enfoque está en el Pacífico”, concluyó, señalando la importancia de un financiamiento significativo por parte de estos países.