Un tema que hasta ahora no ha encontrado salida es el Aeropuerto Internacional de Chinchero, en Cusco. El Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) aún sigue en conversaciones con el Consorcio Natividad, empresa encargada de ejecutar el aeropuerto. La situación se centra, en resumen, en un pedido de la empresa de más de US$ 190 millones adicionales. ¿Qué esperar para la infraestructura aeroportuaria hasta ahora?

Hay que recordar que aún persistiría la disputa por alrededor de US$ 196 millones adicionales que reclama la empresa ejecutora del proyecto para cubrir gastos no previstos. El ministro del sector, Raúl Pérez Reyes, reconoció en junio pasado ante el Parlamento que el contrato tenía “algunos problemas”, pero estos han sido informados permanentemente en busca de alcanzar una solución.

Lo que sucede, explicó el titular del MTC en ese momento, es que el contrato está bajo la modalidad de suma alzada por un valor de US$ 427 millones “que no contempla ninguna posibilidad de revisión del valor sobre la base de la inflación”.

Consultado ahora por esta situación, el ministro, en diálogo con Gestión, señaló que hasta ahora no se llega ningún acuerdo con Natividad al respecto, pero que están contra el reloj, pues su meta es que en dos semanas ya se vea una luz al final del túnel.

“Todavía estamos justamente conversando con ellos para, como mencionamos anterioremente, hacer una reducción del alcance del proyecto. Esperaría que en dos semanas tengamos ya cerrada la solución en términos de la reducción del alcance, con esta primera procura, y lo que haríamos luego es convocar (a otra empresa) para la culminación de la pista y la torre”, comentó el titular del MTC a este diario.

Cabe recordar que actualmente el aeropuerto está bajo la modalidad de Gobierno a Gobierno con el PMO coreano, por lo que este sería el encargado, si así lo coordina con el ministerio, de hacer una nueva procura para continuar lo que Natividad no logre avanzar.

La consulta en este punto, tomando en cuenta que el proyecto solo registra un avance de 12%, es ¿por qué no se ha optado por, por ejemplo, terminar el contrato con Natividad?

“Lo que pasa es que eso implicaría parar la obra casi nueve meses y eso es lo que no queremos ahora. Por eso queremos ver, en qué medida es posible obviamente, reducir el alcance con esta parte del proyecto de formal tal que mientras ellos van concluyendo el terminal, tenemos a otro postor que va avanzando en los frentes de la pista y la torre de control”, respondió.

¿Esto significará un sobrecosto? El ministro comentó a este diario es que están discutiendo con Natividad este punto. “Estamos viendo si la reducción del alcance (del proyecto) impacta”, finalizó.